Con un equipo de especialistas y profesionales técnicos,
el Instituto Nacional de Salud (INS) investiga el brote
de Enfermedad Diarreica Aguda que al parecer ha dejado 14
menores de edad muertos y 60 en observación en el Chocó.
Según la entidad, un grupo especializado visita la zona donde cada
año se presentan de cinco a 15 brotes, por lo que las primeras
evaluaciones de esta epidemia estarían relacionadas con el consumo de agua
contaminada.
“El departamento del Chocó tiene un brote (…)
habitualmente por contaminación de las quebradas con excretas
humanas (por población colona, móvil, muchas veces por minería) que
terminan llegando a los ríos, de donde toman agua algunas poblaciones rurales”,
señala el Instituto.
El INS además confirmó que viene trabajando con
la Secretaría de Salud del Chocó, en una labor de investigación de
campo y atención a la población afectada.
Las autoridades de salud revelaron que hasta el momento se la
logrado confirmar la muerte de un niño con una enfermedad base y relacionada
con Enfermedad Diarreica Aguda, teniendo en cuenta que la mayoría de los
casos que han sido detectados han tenido un manejo clínico especial.
Casos de cólera

Según el Consejo de Autoridades del Pueblo Wounaan de
Colombia (Woundeko), los menores fallecieron luego de la deshidratación
producida por largas temporadas de vómito, diarrea y fiebre, sin que al
parecer hayan sido atendidos por personal médico.
Apolinar Sobricama Piraza, vocero de Woundeko, sostuvo que
desde hace tres años ninguna comisión médica ha ido hasta los resguardos para
atender a los niños y sus familias que viven en condiciones insalubres y con
problemas de alimentación.
“Esto ya se está convirtiendo en una epidemia que es muy difícil
de controlar sin la atención adecuada y para las familias es muy complejo
desplazarse hasta el casco urbano por un hospital”, dijo.
Piraza aseguró que “por lo menos otros 20 niños se encuentran en
estado delicado de salud con los mismos síntomas de los menores
fallecidos”.
A través de un comunicado, la organización le pidió al
gobierno local que gestione la visita de una comisión médica al resguardo, que
está ubicado a cuatro horas del casco urbano del municipio.
Otra de las soluciones que plantea el Consejo, es que la
Gobernación traslade a los enfermos hasta un centro asistencial para su
atención médica. Sin embargo, hasta ahora no se han concretado ninguna de las
alternativas.